Yo no la conocí. Pero pudo ser mi amiga, mi hermana, pudo ser alguna de las mujeres de mi familia... pude ser yo misma...
Micaela tenía un sueño, dos, muchos... Micaela tenía una voz, una sonrisa amplia... Una fecha de cumpleaños, un novio... Una canción favorita. Una familia y hasta quizá una mascota que amaba.
Micaela tenía una carrera y una convicción, Micaela tenía una vida, que hoy ya no tiene mas... A cambio tiene una familia desgarrada, un montón de amigas que han quedado huérfanas de su cariño, un montón de preguntas sin respuestas, un lamentable lugar en una lista que crece día a día de nombres de chicas asesinadas y un montón de voces que claman por justicia.
Micaela no tiene un asesino, no... Micaela tiene en principio dos asesinos con caras visibles... el primero es el infrahumano que terminó con su existencia, el segundo es el que permitió que el primero tenga libertad, en definitiva los dos son responsables, los dos tienen algo en común, le truncaron la vida a una chica que tenía unos ojos profundos, limpios, una chica que sabía lo que quería, que luchaba por las que no tienen voz... y mirá las cosas de la vida no?
Escuchaba ayer , a una de sus amigas que contaba como Micaela representó al país en una actividad deportiva, (no recuerdo cuál, me nubla la memoria la angustia ) y entonces, mientras la chica hablaba, yo pensaba... ojalá este país que ella orgullosamente representó como muchos chicos anónimos , campeones de la vida, que no roban ni matan ni delinquen, sino que encaminan su vida hacia la productividad de practicar un deporte, trabajar o estudiar, ojalá este país, la dignifique,( aunque parezca que de nada sirva ), porque nada le devolverá la vida, y le devuelva en justicia, un poco, solo un poco de todo lo que ella le dió...
Que la voz de Micaela sea la de todos nosotros, que no queremos que haya mas listas de mujeres desaparecidas, asesinadas, golpeadas, maltratadas.
Que la justicia sea justa, y que los asesinos de Micaela, estén donde deben estar. Los dos, los tres. todos porque cuando muere una mujer no hay un solo asesino, las mata un hombre u otra mujer, pero siempre detrás del que quita la vida están los que como este juez inoperante, realizan mal sus funciones, los que saben y callan, los que ven y olvidan, la justicia que no se ejerce y tantas cosas más...
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